Las inundaciones de la posguerra, año 1944. Casas Baratas (Grupo Eduardo Aunós). Segunda Parte.

No habían transcurrido ni siquiera dos años, cuando el río LLobregat volvió a desbordarse, anegando de nuevo las barriadas de Casas Baratas y Casa Antúnez. Dos barriadas muy próximas la una de la otra, pero distintas geográficamente e históricamente en todos los aspectos. Aunque desde la inauguración en 1929 del Grupo de Casas Eduardo Aunós, la prensa y las autoridades como veremos a continuación, la vinculaban todavía en los años 40 con la populosa barriada de Casa Antúnez, creando a veces una sensación de confusión al no poder definir con claridad a cuál de las dos hacían referencia. Sin embargo, no existía relación alguna excepto que ambas estaban ubicadas en las tierras de La Marina de Sants. No obstante, Casa Antúnez, desde mediados del siglo XVIII había empezado a florecer, existiendo argumentos para considerar que aquellas tierras arenosas e improductivas empezaron a ser trabajadas a consecuencia de «una  inundación del Llobregat causada por fuertes lluvias en el año de 1617 – el documento se refiere como el diluvio – hizo que diferentes particulares comenzaran a trabajar las tierras en aquel espacio reservado, aprovechando probablemente el fango que la crecida del río había dejado» logrando con su lenta pero progresiva evolución y con la implicación de familias adineradas, entre ellas la del notario de Barcelona Lluís Xammar que fue el primero en comprar diez mojadas de aquellas tierras a las monjas del Monasterio de Valldoncella, y a la muerte de éste, la viuda y sus hijos vendieron aquella propiedad al maestro de ribera Manuel Antunes y su hijo Joan Antunes y Lletjós, rico comerciante matriculado en la Llotja de Barcelona, creadores de la heredad llamada Can Tunis» que se convertiría en un futuro no muy lejano, en la seña de identidad de toda la zona del litoral del Delta Oriental, desde Montjuïc hasta el faro, conocido como «Farola» de la desembocadura del río Llobregat.

Los efectos del temporal:

La Vanguardia Española de 26 de febrero de 1944, decía lo siguiente:  

El tono de estas líneas ha de ser elegiaco, porque la lluvia que recibimos de tan buen grado, pues venía a esfumar el fantasma de la sequía, se ha convertido, por nuestro mal, en causa de dolores. El agua que tan reclamada fue, ha sido lograda con creces, porque cuando estas líneas escribimos hace ya cuarenta y ocho horas que sobre Barcelona no cesa de caer torrencialmente. El peligro de la sequía se ha desvanecido; pero en cambio, ha surgido, con el duro perfil que la realidad le dibuja, la terrible verdad de las inundaciones, con su cohorte inevitable de excesivas crecidas fluviales, hundimientos de pequeñas construcciones, desprendimientos de tierras, amenaza de cosechas, interrupciones en los transportes, perturbaciones en los servicios eléctricos, etc., etc. Y por encima de todo ello, la triste noticia de que el temporal ha arrebatado preciosas vidas humanas.

Hasta ahora esta lluvia pertinaz no nos había causado a los que en la ciudad vivimos mayores molestias que las de tener que cruzar encharcadas calles y un funcionamiento defectuoso de la electricidad y de los teléfonos. Pero las dábamos por bien sufridas, imaginando que el agua tan esperada beneficiara el campo, pero ahora se nos hacen doblemente desagradables a medida que vamos teniendo noticia de que cada momento parecen ser más graves los serios trastornos y pérdidas que el temporal está causando en toda la comarca barcelonesa.

No había sequía ya este año; pero parece ser que, desgraciadamente, muchas cosechas sufrirán perjuicios mayores que el que aquélla hubiera podido producirles. El agua que podía fecundar la tierra, puede ser que la haya arrasado. Esperemos no obstante, pues no queremos entregarnos al pesimismo, que cuando el cielo se descubra y el sol brille de nuevo no hayan sido tan duras como hoy parecen, con la sola excepción de las vidas que el temporal se ha llevado, las pérdidas sufridas y los daños causados por las aguas, que si en Barcelona han sido motivo de dolor, en el resto de España pueden haber asegurado ricas recolecciones 3.

El temporal de lluvias en Cataluña en febrero de 1944, ocasionan vastas inundaciones, desgracias personales, pérdidas de cosechas y sensibles perturbaciones en los servicios públicos y, como no, en nuestras tierras de la Marina de Sants.

Las consecuencias del temporal de lluvias:

El Llobregat se desborda en una extensión de nueve kilómetros, ocasionando pérdidas cuantiosas.

«Auxilio Social» ha recogido más de 400 personas procedentes de las viviendas inundadas.

En Tarrasa, el muro de contención del pantano de Xuriguera, destruido por la presión de las aguas.

 

Imagen 1. Como podemos ver en estas fotografías, los efectos fueron demoledores.

Mientras tanto, en la madrugada del día 24 de febrero, las aguas acumuladas a consecuencia de las lluvias en el pantano de Xuriguera, 280l m, dejaron claras y sin remedio, las especulaciones habidas sobre algunas deficiencias producidas en su construcción que, a pesar de los avisos realizados pasaron lamentablemente al olvido, ocasionando el desplome del muro de contención por la presión de las aguas.

El pantano de la Xuriguera en Tarrasa:

Imagen 2. Vista del pantano de la Xuriguera en los años treinta del siglo XX.

Se llegó a calcular que más de un millón de metros cúbicos (la capacidad del pantano era de 1.500.000 m), salieron por la riera de Gaià provocando graves destrozos y lamentablemente la muerte de 8 personas (cinco de ellas vecinos de Viladecavalls).

El pantano se construyó en 1902, para suministrar el agua potable a la ciudad de Tarrasa. Debido al crecimiento de ésta y la importante evolución industrial, se tuvo que recurrir a subir el agua del Llobregat, siendo este el motivo por el cual no se volvió a reparar el pantano conocido como «lago» o «llac gran». No obstante, el arquitecto Lluís Muncunill, fue uno de los primeros en detectar deficiencias en su construcción, advirtiendo del peligro que podía ocasionar, sin embargo, no se le hizo caso para su arreglo y sucedió lo que todos conocemos. 

La Vanguardia, informó sobre las nuevas desgracias causadas por el pantano: 

Se tienen muchas noticias de las desgracias causadas por el hundimiento de la presa del embalse de Xuriguera. La caseta del pantano, situada en las inmediaciones del mismo, fue arrastrada por la enorme tromba de agua, habiéndose hallado el cadáver de la esposa del guarda, sin que, hasta el momento, se haya encontrado rastro alguno de su esposo 5.

Se produce el desbordamiento:

El día 26 de febrero, La Vanguardia publica lo siguiente:  

A las tres de la madrugada se desbordó el río LLobregat por veintitrés puntos diferentes, desde Cornellá hasta el mar, en una extensión de nueve kilómetros. Pueden darse por perdidas las cosechas de los campos comprendidos en el término municipal de Hospitalet y zona del Puerto Franco. No se tienen noticias hasta el momento de desgracias personales. Numerosas casas del campo háyanse totalmente sitiadas por el agua, habiéndose trasladado los bomberos y otros servicios para prestar auxilio a los vecinos de las mismas. «Auxilio Social» se ha hecho cargo de más de 400 personas que tienen sus viviendas inundadas. Las fábricas «Colorantes Sintéticos», «Brugarola», y otras de Hospitalet, han quedado igualmente inundadas, así como las «casas baratas» de la barriada de Casa Antúnez. A última hora de la tarde ha llegado a Hospitalet el delegado de información e investigación de Falange y secretario del gobernador civil y jefe provincial de Falange, camarada Pigem, se ha hecho cargo de la magnitud del siniestro. En unión del alcalde y jefe local de Hospitalet, camarada Jonama; del delegado de la C.N.S., camarada Albors, y del prohombre de la Hermandad Sindical de Labradores, camarada Mayola, ha visitado los lugares afectados .

Mi madre contaba que esta riada no les cogió por sorpresa:

Desde que sucedió la terrible inundación del 42, los maquinistas de la línea del tren de la M.Z.A., habían adquirido ellos mismos la responsabilidad de avisar con las sirenas del tren, cuando a su paso por el Llobregat, veían el peligro de desbordamiento. El hondo bramido del silbato de la locomotora, ponía un punto conmovedor cada vez que sonaba en la inmensa soledad de la madrugada. Esto fue lo que nos salvó, porque aunque no pudimos escapar del peligro, por lo menos, no nos cogió de sorpresa y salvamos los enseres más necesarios.

Barriada de Casa Antúnez:

Sobre las inundaciones en la barriada de Casa Antúnez, poco puedo decir, debido a que no he encontrado documentación escrita que pueda aportar, solamente las cuatro letras que La Vanguardia publicó. No obstante, si observamos la fotografía inferior derecha de la portada de La Vanguardia adjunta, la cual podemos ver a continuación, demuestra el desconocimiento a la hora de transmitir el lugar exacto del suceso, ya que estas casas no eran colindantes a la carretera de la Zona Franca (Paseo del Puerto Franco), sino a la carretera de Nuestra Señora de Port.

Imagen 3. Rescate en barca de los vecinos de Casa Antúnez.

Si observamos bien las dos fotografías, aunque se parecen, podemos apreciar pequeñas diferencias, de la que he destacado la siguiente: En la fotografía superior, junto al reflejo  que el agua ofrece del árbol y seguramente del palo del tendido eléctrico, se observa un pequeño saliente de un objeto sin identificar. Sin embargo, cuando bajó el caudal del agua como podemos ver en la fotografía inferior, se ve perfectamente que se trataba de una piedra o roca bastante gruesa, la cual permite apreciar la altura que alcanzó el agua.

Imagen 4. Zona inundada de la barriada de Casa Antúnez.

Al principio pensé que la fotografía podía pertenecer a la barriada de Casa Antúnez, pero no lo tenía nada claro. Sin embargo, ese edificio, lo ubicaba junto a los bloques de pisos de Pujol, que formaban parte del núcleo central del viejo Can Tunis y, que todavía, en la actualidad siguen en pie, aunque con las reformas en las fachadas de los edificios durante tantos años de existencia, no pude identificarlo, hasta que recordé que guardaba un articulo de La Vanguardia titulado «Can Tunis, que morirá tres veces». Fue efusivo cuando lo encontré, porque me solucionó la duda que tenía sobre la ubicación de dicho edificio, ya que en la portada aparecía una fotografía del mismo lugar y del mismo hecho, y esto dejaba claro que se trataba de la barriada de Casa Antúnez 7.

Las consecuencias en Abrera:

La Vanguardia informó sobre la situación en Abrera:

La Casa Consistorial en Abrera amenaza derrumbarse a consecuencia de las inundaciones: Desde el miércoles llueve torrencialmente y la crecida del Llobregat ha embalsado todos los campos colindantes, arrasando por completo las cosechas.

En la villa, la inundación alcanzó varias casas, en especial el edificio del Ayuntamiento, que amenaza derrumbarse, ya que el agua ha reblandecido todos los cimientos.

Aunque hoy el temporal ha amainado, todas las comunicaciones están interrumpidas, ignorándose cuando quedarían normalizados los servicios 8.

Daños en Hospitalet:

Cosechas perdidas: En Hospitalet de Llobregat se van teniendo conocimiento de los graves daños causados por la crecida del río, que ayer, por fortuna, ya comenzó a decrecer. Los daños son muy cuantiosos debiendo darse por pérdida, en absoluto, toda la cosecha de patata, así como todos los forrajes y piensos. Las autoridades locales visitaron al gobernador civil y jefe del Movimiento, para darle cuenta del siniestro y solicitar los auxilios necesarios 9.  

Importantes daños en los terrenos y obras de la Zona Franca:

Imagen 5. Inundación en los terrenos, todavía agrícolas del Consorcio de la Zona Franca, 26 de febrero de 1944.

Son muy importantes los estragos producidos por la inundación en los terrenos y obras de la Zona Franca, situados como es sabido, justo a la desembocadura del Llobregat. Las fincas pertenecientes al Consorcio, y que mientras no se utilicen para las obras de inmediata realización del puerto franco están dedicadas al cultivo, representando un gran porcentaje en el suministro de verduras para Barcelona, han sufrido grandes daños. Y varias de las casas allí enclavadas se han hundido, dejando en la miseria a sus inquilinos 10.

Las autoridades en las zonas inundadas:

El gobernador civil, señor Correa, el alcalde de Barcelona y las autoridades de las poblaciones afectadas reconocieron los lugares perjudicados, adoptando las medidas pertinentes para aminorar los efectos del temporal.

El Llobregat se desborda en una extensión de nueve kilómetros, ocasionando perdidas cuantiosas 11.

Los señores Mateu y Correa visitan las zonas afectadas por la inundación:

Ayer por la mañana el gobernador civil y jefe provincial del Movimiento, camarada Correa, acompañado del Alcalde señor Mateu, ha visitado los diferentes lugares del distrito X, barriadas de San Martín, Pueblo Nuevo y otras inmediatas al mar, que tantos daños han sufrido por el temporal, dictando acertadas medidas para aminorar las consecuencias de las inundaciones y para que los damnificados fueran rápidamente asistidos.

Ambas autoridades estuvieron también en la barriada de Casa Antúnez, a fin de comprobar la efectividad de las medidas que se habían adoptado para a los damnificados. En la citada barriada todas las personas que han tenido que abandonar sus hogares han sido atendidas por «Auxilio Social», habiéndose refugiado en la iglesia parroquial de Nuestra Señora de Port.

El secretario del gobernador civil ha visitado las poblaciones damnificadas. En nombre del gobernador civil y jefe del Movimiento, camarada Correa, y para tomar medidas y disposiciones con el fin de socorrer a los damnificados, su secretario particular, don Rafael Zurita Chacón, se personó en los pueblos de Mollet, Montcada, Martorellas, San Fausto de Campcentelles, Santa María de Martorellas, Santa Coloma de Gramanet, San Adrián de Besós, Cornellá, Molins de Rey, Hospitalet de Llobregat, Viladecans, Tarrasa y San Joan Despí, recorriendo todas las zonas inundadas, habiendo dictado las medidas necesarias para aminorar en lo posible los destrozos de las inundaciones.

El prelado dirige palabras de consuelo a los refugiados en Nuestra Señora de Port:

El obispo de la diócesis, doctor Modrego enterado de que muchas familias de la barriada de Casa Antúnez habían tenido que refugiarse en la iglesia parroquial de Nuestra Señora de Port, se trasladó, con un familiar, señor Muñoz, al citado templo, donde fue acogido con grandes muestras de cariño y respeto.

El prelado recorrió las dependencias del templo totalmente ocupadas por los refugiados, en un total de mil quinientas personas conversando con muchos de los de allí reunidos y dirigiéndoles palabras de consuelo, diciendo que haría cuanto pudiera para atender las necesidades de aquella barriada y que, además, haría un llamamiento a todos los católicos barceloneses para que contribuyeran a remediarlas, siendo despedido con fervientes expresiones de simpatía y gratitud 12.

El señor Correa visita las barriadas que sufrieron los efectos del temporal:

En la mañana del domingo, el gobernador civil y jefe del Movimiento, camarada Correa, estuvo en la barriada de Casa Antúnez, visitando el Grupo de Casas Baratas Aunós y otros lugares de la citada barriada, inspeccionando los servicios de «Auxilio Social» allí instalados, donde se atiende a las familias que debieron de abandonar sus hogares a consecuencia de la inundación y dando órdenes encaminadas al total restablecimiento de la normalidad en aquella barriada.

Estuvo también el señor Correa, en las barriadas del Somorrostro y Pueblo Nuevo. Las numerosas familias que sufrieron los efectos de la inundación, que han sido atendidas por «Auxilio Social», proporcionándoles comidas calientes y otros alimentos. Muchas de las citadas familias se han reintegrado a sus hogares.

Finalmente, el gobernador civil y jefe provincial del Movimiento estuvo en San Adrián, donde inspeccionó la zona afectada por la inundación del río Besós. El puente provisional que quedó destruido, será reconstruido inmediatamente.

En cuanto queden restablecidas las comunicaciones por carretera, el gobernador civil y jefe provincial del Movimiento, se propone visitar las diferentes zonas de la provincia que han sufrido los efectos del reciente temporal de lluvia y nieve 13.

Donativos:

No se puede argumentar nada, o casi nada, sobre los donativos, debido a que si se hicieron con tanta generosidad como en la primera inundación de 1942, La Vanguardia y el Gobierno Civil en esta ocasión no ofrecieron datos de personas y empresas que pudieran haber participado, por lo que se supone, y así apunta, que los donativos pudieron ir canalizados a través del obispado, ya que fue el doctor Modrego el impulsor de aquel llamamiento. Sin embargo, si podemos asegurar que los que llegaron al Gobierno Civil, fueron comunicados por La Vanguardia, veamos uno de ellos:

Para los refugiados en la parroquia de Nuestra Señora de Port, recibimos 100 pesetas a la memoria de don F.M.M., las cuales entregamos al señor cura párroco mediante recibo a favor de esa Administración 14.

Función en el Olimpia a beneficio de los damnificados:

A fin de recaudar fondos destinados a reponer ajuares y utensilios de las familias menesterosas que los hayan perdido en estos temporales, en la ciudad de Barcelona, la empresa del Teatro Olimpia, con el maestro Guerrero, y patrocinado por «Solidaridad Obrera», han dispuesto para el jueves, un magno festival en el que el tenor Beltrán cantará «Marina» y en el que actuaran a continuación la Compañía del Scala de Berlín, y otros artistas de diversos teatros de Barcelona 15.

El temporal de Levante:

A lo largo de la investigación realizada sobre las noticias ofrecidas por La Vanguardia, pude darme cuenta que en ningún momento relacionaron el temporal de Levante reinante en esos días, con el desbordamiento del río y, sabiendo lo que había sucedido en la inundación del 42, relacioné las causas de ambos, llegando a la conclusión de que se produjeron las mismas marejadas que de forma natural, rompían violentamente a lo largo del litoral, hasta la desembocadura del río Llobregat.

Decía La Vanguardia:

El temporal en el mar ha representado en las obras que se realizan para la construcción del puerto franco. La escollera ya comenzada para lo que sería en su día rompeolas ha quedado destruida. Igualmente han sufrido graves perjuicios las obras de muelles y embarcaderos, lo que motivará un sensible retraso en el ritmo que se había conseguido darles a pesar de las dificultades de todo orden que las circunstancias plantean 16.

El temporal en el mar ha decrecido:

Ayer por la mañana comenzó a decrecer considerablemente el temporal de Levante, reinante estos últimos días en la costa catalana, por lo que pudieron salir el «Jaime I», para Mallorca, y el «Ciudad de Mahón», para Mahón, y el «Villa de Madrid», hacía Canarias, buques que habían tenido que demorar su salida desde el jueves 17.

Venta de los terrenos del Arsenal Civil de Barcelona:

En el puente del tren de la M.Z.A., terminaba la calle de la Industria (actual Paseo de la Zona Franca), a parir del puente empezaba un camino agrícola que iba introduciéndose entre los campos hasta que llegaba a uno de los dos lagos artificiales de agua dulce que se habían producido por la extracción de la arena destinada a la construcción. Se bordeaba éste por su margen izquierda hasta que llegaba a la playa, pasando entre enormes diques de hormigón y algunas defensas de costa -nidos de ametralladoras- que habían quedado allí olvidadas después de la Guerra Civil; ya estábamos dentro de los terrenos que habían pertenecido al Arsenal Civil y que había comprado el Consorcio del Puerto Franco de Barcelona. Aquel tramo de la playa se conocía como «la playa de los bloques», y también como la playa del lago».

Imagen 6. Lago de agua dulce a finales de los años 50 y principios de los 60. Al fondo el muro que posiblemente construyera la empresa Arsenal Civil de Barcelona. A la derecha de la imagen, mi hermana Ángeles, en medio un buen amigo y a la izquierda, el autor de este artículo.

En general, los terrenos del Arsenal Civil sumaban entonces 210.000 metros2 , de los que 14.860 estaban cercados, más de 10.000 metros2 estaban construidos.

En 1925 el Arsenal Civil seguía en situación de quiebra técnica: sus deudas ascendían a 2.709.000 pesetas (1.250.000 pesetas a los accionistas más 1.459.000 pesetas a los acreedores por cuenta corriente). La resolución final vino poco después de la mano del Consorcio del Puerto Franco de Barcelona: en noviembre de 1928 dicho consorcio ofreció su última y definitiva oferta para la expropiación forzosa de los terrenos de Casa Antúnez; una dolorosa transacción que los administradores del Arsenal Civil aceptaron resignadamente.

 

Por sus terrenos el veterano Arsenal Civil percibió únicamente 385.000 pesetas; de esa manera, no pudo más que cubrir un 7’5 por 100 de las deudas a los acreedores por cuenta corriente. A la Compañía Trasatlántica, por ejemplo, sólo le pudieron pagar 60.494 pesetas, cuando el saldo de su cuenta corriente ascendía a 801.554 pesetas. El valor de las acciones se dio entonces por completamente perdido; y se aceptó que la sociedad debía liquidarse ineludiblemente. Terminaba en 1929 la vida de una firma industrial nacida en 1891 ( 0, mejor aún, en 1886). Sin embargo, únicamente entre 1892 y 1899 el Arsenal Civil alcanzó una etapa de notable esplendor 18.

Plano 1. Plano de Barcelona entre los años 1714-1940. Litoral de Casa Antúnez.

A: En amarillo, camino del Puente de las Vacas. A finales de los años 40, el camino venía procedente de la barriada de Nuevo Port, en la actualidad barriada de Santiveri, cruzaba ésta y la línea del tren de la M.Z.A., antigua línea de Villanueva, y seguía bordeando la gran cloaca para llegar a la plaza del Hipódromo, donde desembocaba en el Paseo de la Agricultura.

B: En azul, cloaca que venía desde la Plaza Cerdá, hasta el mar. Fue construida a partir de 1929 por la empresa Fomento de Obras y Construcciones, para recoger las aguas pluviales y residuales del Ensanche y Sants, para desaguarlas en el mar.

C: Hipódromo de Barcelona, conocido también como Hipódromo de Casa Antúnez.

D: Dentro del círculo rojo, camino del Puente de las Vacas.

E: En amarillo, camino o carretera que llevaba al Arsenal Civil de Barcelona.

F: Arsenal Civil de Barcelona (1886-1929).

G: Desembocadura de la cloaca en el mar.

H: Masía de Cal Sigalet Vell, el Tiro al Pichón y barriada de pescadores.

 I: Zona ampliable del Puerto de Barcelona, donde se construiría el Muelle Príncipes de España, y en su prolongación hacía el LLobregat, el nuevo puerto Aduanero del Puerto Franco.

J: Final de la ampliación del dique del Este.

K: Zona de viviendas donde fueron rescatados sus habitantes con escaleras y barcas.

Siendo ya el Consorcio del Puerto Franco de Barcelona, el propietario de los terrenos del Arsenal Civil  a finales de 1928, encarga un Estudio para la futura ampliación del puerto Aduanero y la situación de la entrada de éste:

Por R.O. de 22 de junio de 1929, se encargó redactar un Estudio acerca de la ampliación del puerto Aduanero y de la situación de la entrada al Puerto Franco, con propuesta de las soluciones que mejor podían armonizar los intereses de ambos puertos, Estudio que se subscribió el 4 de octubre de 1929. Puede apreciarse que era un Estudio con el pie forjado de armonizar dos intereses. En este trabajo, y en una de sus soluciones, se proponían dos nuevos diques exteriores para ampliar el Puerto y de esta obra aprobada en planta ya hemos hablado en varios lugares de esta Memoria.

Fijada la entrada al Puerto Franco en el llamado Pont de las Vacas como a todas luces más conveniente, el trazado del nuevo Contradique era forzado porque había de comprender y proteger esta entrada que quedaba bastante lejana hacía el Sur y para no alcanzar en demasía la nueva prolongación del Dique, este hubo que dar al Contradique el trazado que se ve en los planos (A y B) 19.

Por otro lado, el 10 de marzo de 1947, se remite un informe a la Presidencia de la Junta de Obras del Puerto de Barcelona, que en uno de sus párrafos decía lo siguiente:

El cambio de la concesión en (A) por otra en  (B ) facilitaría la construcción de los Astilleros por estar en (B) algo protegida la ejecución por el pequeño espigón que está construyendo la Zona Franca. Las obras de los nuevos diques exteriores no han empezado todavía 20.

Imagen 7, Reproducción de unos planos con dos soluciones, estudiadas para la construcción de unos astilleros en este puerto, que no llegaron a construirse. (Planos que se denominaron A y B).

Sin embargo, en el proyecto del espigón del Canal de la Infanta, La Junta de Obras y Servicios del Puerto de Barcelona, reconocía sobre las marejadas con temporales lo siguiente:

El sector de marejadas en esta costa se extiende desde el S. S.E. al E. N.E., aproximadamente, con temporales máximos casi en el rumbo E., y también fuertes en el S. S.E. Hay una entrada de arenas que siguen la costa y van acechándose al Contradique, elevando los fondos del Antepuerto y amenazando la canal; también a este mar contribuyen las materias que llevan las aguas sucias de la Ciudad que salen por la desembocadura de la cloaca, junto al arranque exterior del Contradique, servidumbre que soporta el puerto, perjudicial desde numerosos puntos de vista. El espigón proyectado tiende a detener esta entrada de arenas 21.

Los efectos del temporal en 1942 y 1943:

Después de la Guerra Civil, el Dique del Este se mantenía bastante bien: 

El 21 de diciembre de 1942 se firmó un proyecto para construir y colocar 35 bloques en algunos puntos que habían dañado los temporales y de urgente reparación. El 18 de abril de 1943 se firmó un Proyecto para construir y colocar 600 bloques para reforzar la defensa de bloques, muy duramente atacadas por los temporales del invierno de 1942-1943, y singularmente el de marzo de 1943; siendo todos construidos y colocados 22.

Imagen 8. Muelle Occidental. Taller de bloques. al fondo la hormigonera.

 

Imagen 9. Prolongación del Dique del Este. Reparación de los desperfectos ocasionados por el temporal de febrero de 1920.

Anteriormente, a consecuencia de un fuerte temporal producido en febrero de 1920, abrió una brecha en la prolongación del dique del Este, tal y como podemos ver en la fotografía adjunta, siendo reparado con bloques de hormigón de 60 toneladas.

Imagen 10. Brecha producida por el temporal de febrero de 1920.

Mientras se estudiaban los proyectos para construir nuevos espigones y diques para la protección y ampliación del puerto Aduanero de Barcelona -Puerto Franco- y se decidían por construir un  Astillero en lo que se denominaría Dársena de Casa Antúnez, las marejadas que se extendían por su propia naturaleza desde el S. S.E. al E, N.E., seguirán ofreciendo en colaboración con los temporales máximos casi en el rumbo E., y también fuertes en el S. S.E., el peligro inminente sobre la costa de Casa Antúnez hasta la desembocadura del Llobregat. El desbordamiento del río en sí, se produjo hasta el término municipal de Cornellá, en veintitrés puntos diferentes, lo que hace pensar que de nuevo se  produjo un tapón de arena en la embocadura del río, produciendo el retroceso y aumento brutal del cauce de éste. Esto no quiere decir que el cauce del río no se desbordara desde Cornellá hacía Martorell, porque hubo como ya sabemos inundaciones en Sant Joan Despí, Molins de Rei y Abrera, pero las aguas más agresivas e invasivas se produjeron en la parte baja del Delta, ocupando todas las zonas agrícolas del Prat de Llobregat y su aeropuerto, de la Marina de l’Hospitalet y Sants Montjuïc, hasta el pie mismo de la montaña, inundando como ya sabemos, las barriadas de Casa Antúnez y Casas Baratas Grupo Eduardo Aunós.

Al igual que en otras inundaciones pasadas quedaron registrados los puntos máximos por m/s del caudal a su paso por Martorell o Molins de Rei, en este caso, parece ser que no fue así, veamos lo que dice La Vanguardia:

Ruego de la Universidad de Barcelona.

Se ruega a cuantas personas hayan obtenido fotografías de las crecidas e inundaciones producidas actualmente en los ríos de Cataluña y cuantos hayan podido obtener datos y observaciones referentes a las mismas (altura máxima de las aguas, fases de la crecida, arrastres, daños, etc.), en las localidades afectadas, se sirvan comunicarlas a la Sección de Morfología del Instituto «Lucas Mallada» (laboratorio de Geología, Universidad de Barcelona) colaboración que, en provecho de los estudios que realiza dicho Instituto, se agradecerá profundamente 23.

Fue esta petición de la Universidad de Barcelona, la que me indujo  a pensar que no habían sido tomados los registros del cauce del río, quizás porque aunque se desbordara en Abrera, Molins de Rei y Sant Joant Despí, no llevaba un excesivo caudal de agua como para realizar el desbordamiento que llegó a causar en su parte baja, siendo la causa de éste en la parte alta, posiblemente por acumulación excesiva de las aguas caídas por las lluvias torrenciales en esas zonas específicas y que sus diferentes rieras recogieron para desaguar en el río principal, produciendo el desbordamiento en esos municipios afectados.

Sin embargo, un estudio realizado 50 años más tarde conocido como CEDEX. 1995, en cuanto a las avenidas del siglo XX, se convierte en el más completo a este respecto, recogiendo los siguientes datos de caudales máximos en Martorell ( azud de Sedó), indica que en 1944 el caudal máximo de las aguas fue de 1.600 m3/s medidos a su paso por Sant Boi de Llobregat, algo menos que la inundación de 1942 que fueron 1.750 m3/s a su paso por Martorell 24.

Las lluvias y las inundaciones agravaron la habitabilidad de las viviendas:

Como ya dejé prever en el comentario realizado en el anterior capítulo de la inundación de 1942, no todos los problemas se podían achacar a las inundaciones del río, sino que existían elementos importantes que a la hora de construir aquella nueva barriada sobre aquellos terrenos deltaicos conocidos como «Prat d’Ensirés» y » Tres Ponts», de escasa altitud sobre el nivel del mar y con el agravante que representaba la desembocadura del río, que quedaba obstruida por la formación de bancos de arena o por la entrada del agua del mar cuando había temporal de Levante, no se tuvieron en cuenta siendo fundamental a la hora de desaguar las fuertes lluvias y el desbordamiento del río.

El Patronato de la Habitación se comprometió a realizar las obras de urbanización necesarias para la buena habitabilidad de las viviendas, en ellas: la explanación y topografía del terreno, desagües  levantamiento de la rasante del terreno 25.

Al estar el terreno a una escasa altitud sobre el nivel del mar, no fue necesario realizar la explanación, sin embargo, solo existían 30 centímetros de desnivel entre el terreno y el colector del desagüe, por lo cual era insuficiente para garantizar su correcto funcionamiento. Solamente se requería formar un terraplén de un metro sobre el terreno natural para cubrir la totalidad del emplazamiento de la barriada, y de esa forma solucionar en parte el problema de los desagües, cosa que se consiguió, parece ser, tal y como podemos ver en el plano adjunto, construyendo una cámara de aire, para aislar a las viviendas de la humedad. No obstante, las cámaras de aire se hicieron sin ventilación y con tabiques pluviales, y los que vivimos allí, sabemos que la mayoría de aquellas cámaras de aire fueron utilizadas para arrojar los escombros que se producían de las reformas de dichas casas, con el simple hecho de hacer un agujero en el suelo, pudiendo afirmar a la vez, la precariedad de aquellas viviendas, cuando sentíamos en nuestros huesos la humedad que subía por las paredes a consecuencia entre otras cosas, del mal sistema de cloacas y desagües que resultaban ser inadecuados para canalizar el agua de las calles de la barriada, no solamente cuando llovía agresivamente sino también cuando lo hacía paulatinamente.

Dibujo 1. Detalle constructivo vivienda tipo «B», sobre dibujo de Gabriela Morales Ramírez.

Sin embargo, no hay que achacarle todo el problema de la humedad a las cámaras de ventilación y al sistema de cloacas. Veamos lo que argumenta Grabiela Morales Ramírez en su tesis doctoral referente al inicio de la vivienda obrera en Barcelona:

También tienen toda esta extensísima zona el problema de ser bajos los terrenos y dada la proximidad de la capa acuífera que impregna todo el terreno, en inviernos crudos, son húmedos.

El nivel de las aguas en verano queda seguramente a una profundidad no  superior a un metro y seguramente en épocas de grandes lluvias la proximidad a la superficie es muchísima inferior 26.

Derribo de la calle Ascó, la 8:

La fotografía que podemos ver a continuación, está realizada a finales de los años 70 o principios de los 80. En ella se pueden observar detalles importantes relacionados sobre la construcción de las viviendas, y que quedaron al descubierto después del derribo de la calle Ascó; como la banqueta de hormigón que a lo largo de la calle soportaba las paredes de las fachadas de las viviendas tal y como podemos apreciar en el dibujo anterior, así como las paredes  con  las ventanas de las habitaciones interiores y las puertas que salían a los patios que formaban el muro para limitar con los campos agrícolas. Al fondo de la calle y a lo lejos, podemos ver las construcciones que se llevaban a cabo en la Zona Franca, creo que se trataba del nuevo edificio de oficinas de Transports Metropolitans de Barcelona (T.M.B.), en los terrenos del antiguo Hipódromo de Casa Antúnez.

Imagen 11. Derribo de la calle Ascó. En el centro de la imagen, la señora Juanita Girona Martínez y junto a ella, Antonio Santafé.

 

Imagen 12. Casi cuatro décadas después, siguen estando presentes las ruinas de la calle Ascó.

Cuando se desbordaba el río Llobregat:

La margen izquierda del Llobregat, era la causante  directa de las inundaciones en toda la extensión de la Marina de l’Hospitalet  y Barcelona, Cornellá y pueblos adyacentes. Al Sur de la barriada de Casas Baratas se encontraba la antigua línea del tren de Villanueva inaugurada el 29 de diciembre de 1891 y absorbida posteriormente por la M.Z.A. (Madrid-Zaragoza-Alicante), la cual cortaba en dos los campos agrícolas que se extendían hasta el pie mismo de la montaña de Montjuïc, formando un dique de contención que en el Sureste se unía a la calle de la Industria (en la actualidad, Paseo de la Zona Franca), que también formaba otro dique de contención debido al terraplén que se construyó para la construcción de la gran cloaca que desembocaba en las aguas de la playa de Casa Antúnez.

Imagen 13. Pastor con su rebaño de ovejas, en la Marina de Sants. Camino agrícola y puente que cruzaba el terraplén que formaba la línea del tren de la M.Z.A., allá por los años 1960.

Entre la unión de ambos diques se formaba un punto muerto y a consecuencia de este, un espacio desmesurado sin salida, que cuando el río se desbordaba, sus aguas llegaban lentamente conducidas por la corriente prácticamente a través del terraplén de la línea del tren, produciéndose una inexorable subida del nivel, cubriendo todos los terrenos y algunas casas, llegando a semejarse a una dársena inmensa.

Por otro lado, al Noroeste, la calle de la Industria o Paseo de la Zona Franca, se unía con la Avenida de las Cortes Catalanas (Gran Vía), formando de nuevo un obstáculo insuperable para las aguas producido por el terraplén y el muro que se había construido para dicha vía pública que, posiblemente, para finales de los años 40 principios de los 50 ya llegaba hasta el río Llobregat.

Veamos un párrafo de las noticias que ofreció La Vanguardia Española sobre las inundaciones en la primavera de 1942:

En la noche anterior, según dijimos, el río Besós fue el primero en desbordarse e inundar las huertas y el sin número de casitas construidas en las cercanías de Santa Coloma, y en la madrugada siguiente, el Llobregat, cuyo caudal siguió creciendo, se desbordó igualmente cerca de Barcelona, convirtiendo en un extenso lago la ferocísimas vegas que enriquecen esta comarca. Esta vez, las aguas del Llobregat llegaron en su inundación hasta la ciudad misma, al extremo que cubrieron a buen nivel, una extensa faja de la calle de Cortes (Gran Vía) en su confluencia con el límite de Hospitalet, lugar desde donde ayer tarde se divisaba un desolador panorama 27.

Dibujo 2. Zonas identificadas sobre el dibujo de Gabriela Morales Ramírez, sobre su tesis doctoral, página 123.

A: Vértice formado por los ángulos de la línea del tren de la M.Z.A., y la calle de la Industria (actual Paseo de la Zona Franca). Justo al lado y ubicada entre la línea del tren y la actual calle de los Motores, se encontraba la masía can Cisó, anteriormente llamada can Navarro. En la actualidad en estos terrenos está ubicada la Fundació Banc dels Aliments, junto al lado del Instituto Mare de Déu de la Mercè.

B: Vértice formado por los ángulos de la calle Industria, y Avenida de las Cortes Catalanas, justo al lado del término municipal de l’Hospitalet de Llobregat.

C: Tramo construido desde la Riera Blanca hasta la carretera que conduce al Prat de Llobregat, la longitud construida fue de 800 metros. Realizado el estudio correspondiente se acordó después de varios trámites, la ampliación del terraplenado para seguir  el mismo trazado que se seguiría en Barcelona desde el paseo de la Industria hasta la Riera Blanca. Además, se propuso la construcción de alcantarillas y el muro de contención de tierras a efectos de que la obra fuese definitiva y nunca más hubiera de pensarse en ella. Las obras fueron adjudicadas a la Sociedad de Fomento de Obras y Construcciones, con un coste de 682.179,20 pesetas, que el Ayuntamiento de l’Hospitalet pagó en cuatro anualidades, una cuarta parte en cada uno de los ejercicios de 1929, 1930, 1931 y 1932 28.

D: Puente de hierro que cruza el río Llobregat.

La inundación se producía en ambas márgenes del terraplén de la vía de la M.Z.A. La influencia del agua que invadía el sector A, se dispersaba sobre la zona agrícola de la Marina de l’Hospitalet y Sants Montjuïc, llegando desde el Oeste y distribuyéndose hacía el Norte y Sur desde el Grupo Eduardo Aunós hasta la Gran Vía, tal y como ocurrió en 1942. El sector B, se dispersaba sobre la parte baja de la Marina de l’Hospitalet y Sants Montjuïc hasta el pie mismo de la montaña de Montjuïc. Con toda seguridad, puedo decir, que a lo largo del terraplén del tren, solamente se pudieron unir las aguas de ambos sectores a través de los puentes de los caminos agrícolas.

Cuando el agua llegaba a las Casas Baratas:

Dentro de los elementos adversos mencionados, nos encontrábamos más a más, con el que ofrecían las calles Ulldecona, la 7, y Arnés la 1, ésta en su unión con lo que sería la plaza de la Fragua (actual plaza del Nou), con la bifurcación del camino del Prat Vermell (en la actualidad calle Cisell), que a la altura de la calle Sovelles, la 21, se alzaban para coger el nivel del actual Paseo de la Zona Franca, produciéndose un desnivel considerable que detenía el avance de la avenida del río, haciendo que el agua se retuviera y subiera su nivel en las calles bajas de la barriada, dado que las cloacas y los colectores  no daban  abasto a desaguar el agua que entraba irremediablemente por todos lados, cosa que se producía cuando el río de nuevo descendía su caudal.

Imagen 14. Vista aérea de las Casas Baratas Grupo Eduardo Aunós. Fotografía realizada a finales de los años 40.

A: Paseo de la Zona Franca, muros que se levantaron para realizar el terraplén que alojó a la gran cloaca que venía desde la actual plaza Cerdá, hasta la playa de Casa Antúnez.

B: Entrada y salida de la calle Ulldecona, únicamente permitida por el Paseo de la Zona Franca.

C: Calle Sovelles, donde prácticamente empezaba el terreno ascendente hasta el nivel del Paseo de la Zona Franca.

D: Vivienda de mi madre y mis abuelos. Calle Tortosa, la 4, esquina a la calle Forets, la 18.

E: Fábrica de Estampados Bertrán i Serra. Conocida también como Prat Vermell.

F: Camino del Prat Vermell, muro exterior y entrada a la fábrica.

G: Calle Arnés, desde la entrada a la fábrica hasta la calle Sovelles, iba paralela al Camino del Prat Vermell, y desde dicha entrada hasta la calle Ascó, cerraba la barriada por el Oeste, estando constituida por el muro interior de la fábrica, conectando a la vez en el Suroeste de la barriada con la calle Ulldecona.

H: Casas de la Estación y línea del tren de la M.Z.A., dirección al Prat de Llobregat, formando el dique de contención hasta el Paseo de la Zona Franca.

 I: Camino del Prat Vermell. Calle existente que se integra al trazado y permite la entrada y salida del conjunto hacía el Paseo de la Zona Franca, habilitando la conexión Norte y Sur.

J: Fábrica Prat Nou, Colonia Bausili y grupo de casitas nuevas «casas de refugio» que a partir de 1948 formaron parte de la calle Sovelles. En los terrenos adyacentes se ubicó en 1952 una fábrica que se llamó Talleres Balcells, también conocida en el barrio como «tubos Bergman», con una superficie de 10.000 m2.

Una vez pasadas las casas de la Estación de Casa Antúnez, las aguas llegaban sin obstáculo alguno hasta la barriada, encontrándose primero con el dique del muro que por el Oeste cerraba la fábrica Bertrán i Serra y las paredes que a la vez hacían de muro que formaban y resguardaban a lo largo de la calle Ascó los patios de las viviendas, de los campos agrícolas que rodeaban la barriada. El agua para sobrepasar el obstáculo de dicho muro, derivaba su caudal hacía el Norte buscando el muro exterior de la fábrica y el Camino del Prat Vermell, donde en la entrada de la fábrica la corriente del agua entrada como una exhalación para inundar las calles del barrio,  y por el Sur,  hacía los campos que lindaban entre la línea del tren y la calle Ulldecona, se unían ambas corrientes fluviales al grueso de las aguas que avanzaban por los espacios abiertos hacía el Paseo de la Zona Franca, produciéndose un envolvimiento irremediable donde las plazas y calles de tierra quedaban totalmente inundadas, dejando un paisaje ruinoso y desolador.

No hay dos sin tres:

Cuando realizaba la investigación sobre las Casas Baratas en la tesis doctoral de la señora Gabriela Morales Ramírez, encontré un dato muy importante sobre lo que había documentado Francisco Candel en una de sus obras, referente a las inundaciones producidas por el río Llobregat. No me podía creer lo que estaba leyendo, las palabras escritas de Francisco Candel eran contundentes a la hora de afirmar que la primera inundación fue en 1944, o sea, la que documento en este artículo, y la segunda  en 1971 que, evidentemente, sucedió a media tarde, y no de madrugada como las de 1942 y 1944.

Veamos lo que dice Francisco Candel sobre las inundaciones de las Casas Baratas:

La primera vez que se inundó esta barriada fue de noche y sin avisar. La gente salió con agua hasta la cintura y todo se hecho a perder. Nunca han sido riadas turbulentas, sino una lenta e inexorable subida de las aguas. (…) La segunda vez la inundación fue a media tarde. Se sabía que el río avanzaba pausadamente y sin obstáculos (…) Desde entonces ha quedado entre los moradores de esta barriada una psicosis angustiosa de inundación 29.

Estaba confuso y necesitaba encontrar algún dato más que me pudiera ofrecer una opinión responsable y certera, la cual encontré a través del escritor y periodista Josep María Huertas Clavería, donde en Cuadernos de Estudio y Cultura «Homenaje a Francisco Candel», decía lo siguiente:

El 25 de febrero de 1944 el río Llobregat se desbordó de tal manera que inundó las Casas Baratas y el barrio de Casa Antúnez. Cerca de 2000 personas se tuvieron que refugiar en la parroquia de la Maré de Deú de Port 30.

Al principio me quedé algo extrañado y sorprendido, porque ninguno de los dos personaje se habían referido en sus obras a una de las tres inundaciones más severas que el río Llobregat había producido en el siglo XX (1942, 1962 y 1971). No puedo explicar el cómo y el por qué pasaron por alto esta inundación, y por mucho que he indagado no encuentro una respuesta concluyente, porque el eco de aquella tragedia llegó a todos los rincones de la provincia de Barcelona de la mano de La Vanguardia Española, que emitió un extenso y emotivo artículo. Particularmente, creo suponer, que al señor Candel, que había nacido un año antes que mi madre (1925), le ocurriera lo mismo que a ella y que al señor Joan Soler, vecino del barrio que fue entrevistado por la revista la «Marina», ellos sabían que se habían producido unas inundaciones, que trataron de contar entrelazando recuerdos diversos que no aclaraban definitivamente si fueron una o dos las riadas sufridas en tiempo de la posguerra.

Por lo cual, me gustaría que la fecha del 29 de abril de 1942, se ilustrara y se recordara en la memoria histórica del Grupo Eduardo Aunós, porque desgraciadamente a lo largo de la existencia de las Casas Baratas, no fueron dos sino tres las inundaciones que tuvieron que soportar sus moradores, que ya conocían la psicosis angustiosa desde 1942 y las posteriores,  provocadas irremediablemente a pesar de la urgente canalización del río, que solamente era recordado cuando éste se desbordaba produciendo una catástrofe, evidenciando la lucha del hombre contra la naturaleza.

Para terminar, veamos a continuación parte de un artículo publicado por La Vanguardia, titulado «La defensa contra las inundaciones»:

No se trata de intereses aislados ni de aisladas aportaciones para afrontar el grave asunto. Se trata de una típica labor de unidad y de concierto que cuadra muy bien con el criterio cardinal y los modos del Estado español. De nada serviría que cualquiera de las entidades o de los particulares afectados por la constante amenaza de las inundaciones pusiera manos a la tarea de defender su predio contra las mismas, si el colindante de aquí, o el vecino de la otra orilla o el de más allá o el de más acá, si todos en fin, no se concertasen en una obra común para la común defensa. Estamos, pues, ante un caso especifico de unificación de esfuerzos, de voluntades y de colaboraciones. Y nadie como el gobernador civil actual de Barcelona, que a la autoridad del cargo une la de su persona y hasta la de su solvencia técnica en cuestiones de ingeniería, nadie en fin, como el señor Correa Véglisson puede asumir esta unificación, en la que no habían de faltarle las asistencias de todo género, necesarias para que persona y función tan embargadas de tareas como las del propio gobernador no tengan que descender a la organización minuciosa de los trabajos indispensables. (…) Nos referimos a la imperiosa urgencia del encauzamiento, canalización o como quiera llamársele del río Llobregat para prevenir la repetición endémica de las asoladoras inundaciones que cada siete u ocho meses cuestan tantas lágrimas y tantas ruinas, particulares y colectivas. Al frente de la provincia de Barcelona está, en el ejercicio de la unidad del mando que es expresión de la unidad de colaboración y de disciplina, un gobernante ejemplar por la polifacética actividad de su talento y por la prodigiosa multiplicación de sus actividades. El nombre de Corre Véglisson quedará incorporado a la historia de Barcelona como un positivo valor en los anales de su prosperidad moral y material. Pues a esa ejecutoria, limpia e insuperable, puede añadirse el blasón que le discernirá el hecho de que, también bajo su mando, se aborde, a ser posible se finiquite, el problema de la defensa contra las inundaciones y desbordamiento del citado río 31.

Imágenes:

Portada:

Vista de la Palanca, durante una crecida del Llobregat a su paso por Sant Andreu de la Barca. Año desconocido. Archivo histórico de SAB.

Sant Andreu de la Barca la nostra vila, la nostra historia.

Web: Riadas de SAB/Facebook.

 

1.- Portada La Vanguardia Española. Edición, domingo 27 de febrero de 1944. Núm. 24.177.

2.- Vista del pantano de Xuriguera en los años treinta del siglo XX. Autor desconocido. Fuente: Arxiu de la Mina d’Aigues de Terrassa.

https:// researchgate.net/figure/Figura-21-Vista-del-panta-de-la-Xuriguera-als-anys-trenta-del-segle-XX-Autor_fig 10_301549269.

3.- Portada La Vanguardia Española. Edición, domingo 27 de febrero de 1944. Núm. 24.177.

4.- La Vanguardia Española. Edición, miércoles 29 de septiembre de 2004. Artículo de Josep María Huertas Clavería. Vivir, página 7.

5.- Web: Las edades de la Zona Franca. VERSIÓN EN CASTELLANO.

6.- Fotografía, archivo familia Santafé.

7.- Archivo histórico-Port de Barcelona. Junta de Obras del Puerto de Barcelona. Memoria_1935-1942. Imágenes núm. 60 y 61.

8.- Archivo histórico-Port de Barcelona. Junta de Obras del Puerto de Barcelona. Memoria_1935-1942. Imagen núm. 112.

9.- Archivo histórico-Port de Barcelona. Junta de Obras del Puerto de Barcelona. Memoria_1943-1947. Imagen núm. 39.

10.- Archivo histórico-Port de Barcelona. Junta de Obras del Puerto de Barcelona. Memoria_1943-1947. Imagen núm. 38.

11.- Fotografía, archivo familia Santafé.

12.- Fotografía año 2020. Autor A. Santafé.

13.- Fotografía de autor desconocido. Arxiu Municipal del Districte de Sants Montjuïc (AMDS). Una història de La Marina de Sants – Vides paral-leles, página 27.

14.- Fotografía de autor desconocido. Arxiu Municipal del Districte de Sants Montjuïc (AMDS). Una historia de La Marina de Sants – Vides paral-leles, página 60.

Dibujos:

1.- Web: El inicio de la vivienda obrera en Barcelona: las casas baratas. (Tesis doctoral de Gabriela Morales Ramírez, página 113).

https:// upcommons.upc.edu>handle (Abrir, TGMR 1 de 2 pdf).

2.- Web: El inicio de la vivienda obrera en Barcelona: las casas baratas. (Tesis doctoral de Gabriela Morales Ramírez, página 123).       

https:// upcommons.upc.edu>handle (Abrir, TGMR 1 de 2 pdf).

Planos:

1.- Litoral de Casa Antúnez. Plano de Barcelona entre los años 1714-1940. Ajuntament de Barcelona. Institut Municipal d’Historia. La Ciutat de les Ciutats. Centre de Cultura Contemporánea de Barcelona. Lunwerg Editors.

Notas:

 1. Una historia de La Marina de Sants – Vidas Paralelas. Edita: Ajuntament de Barcelona i Concell Municipal del Districte de Sants Montjuïc. ISBN. 978-84-9850-021-9. Año 2007, página 105.

 2. Una historia de La Marina de Sants – Vidas Paralelas. Edita: Ajuntament de Barcelona i Concell Municipal del Districte de Sants Montjuïc. ISBN. 978- 84- 9850-021-9. Año 2007, página 107.

 3. La Vanguardia Española. Edición, sábado 26 de febrero de 1944. Núm. 24176, página 8.

 4.- Https:// recordsdeterrassa.wordpress.com/2007/06/19/el-panta-de-la-xuriguera.

 5. La Vanguardia Española. Edición, domingo 27 de febrero de 1944. Núm. 24.177, página 3.

 6. La Vanguardia Española. Edición, sábado 26 de febrero de 1944. Núm. 24.176, página 3.

 7. La Vanguardia. Edición, miércoles 29 de septiembre de 2004. Artículo de Josep María Huertas Clavería. Vivir, página 7.

 8. La Vanguardia Española. Edición, domingo 27 de febrero de 1944. Núm. 24.177, página 3.

 9. La Vanguardia Española. Edición, domingo 27 de febrero de 1944. Núm. 24.177, página 3.

10. La Vanguardia Española. Edición, domingo 27 de febrero de 1944. Núm. 24.177, página 3.

11. La Vanguardia Española. Edición, sábado 26 de febrero de 1944. Núm. 24.176, página 3.

12. La Vanguardia Española. Edición, domingo 27 de febrero de 1944. Núm. 24.177, página 3.

13. La Vanguardia Española. Edición, martes 29 de febrero de 1944. Núm. 24.178, página 4.

14. La Vanguardia Española. Edición, martes 29 de febrero de 1944. Núm. 24.178, página 9.

15. La Vanguardia Española. Edición, martes 29 de febrero de 1944. Núm. 24.178, página 4.

16. La Vanguardia Española. Edición, domingo 27 de febrero de 1944. Núm. 24.177, página 3.

17. La Vanguardia Española. Edición, domingo 27 de febrero de 1944. Núm. 24.177, página 3.

18. Web: La industria de construcciones mecánicas en Cataluña: el Arsenal Civil de Barcelona. Martín Rodrigo 39048422, páginas 168, 173 y 174.

19. Web: Archivo histórico-Port Barcelona. Junta de Obras del Puerto de Barcelona. Memoria_1943-1947, página 246.

20. Web: Archivo histórico-Port Barcelona. Junta de Obras del Puerto de Barcelona. Memoria_1943-1947, páginas 253 y 254.

21. Web: Archivo histórico-Port  de Barcelona. Junta de Obras del Puerto de Barcelona. Memoria_1943-1947, página 96.

22. Web: Archivo histórico-Port de Barcelona. Junta de Obras del Puerto de Barcelona. Memoria_1943-1947, página 83.

23. La Vanguardia Española. Edición, martes 29 de febrero de 1944. Núm. 24.178, página 4.

24. Web: Estudio de la evolución morfodinámica del río Llobregat en su tramo final. Página 22.

https:// upcommons.upc.edu>bitstream>handle, pdf.

25. Memoria técnica descriptiva del Emplazamiento del primer Grupo de Viviendas «Eduardo Aunós». Patronato de la Habitación de Barcelona. Julio de 1928.

26. Web: El inicio de la vivienda obrera en Barcelona: las casas baratas (Tesis doctoral de Gabriela Morales Ramírez. Página 122.

https://upcommons .upc.edu>handle (Abrir, TGMR 1 de 2 pdf.).

27. La Vanguardia Española. Edición, jueves 30 de abril de 1942. Núm. 23.607, página 1.

28. Web: Perllongació de la Gran Vía, 1928 (1)/L’Hospitalet de Llobregat.

https:// lhospitaletdellobregat.wordpress.com>…

29. Francisco Candel. Apuntes para una sociología del barrio. Ediciones Península, Barcelona 1972, página 130. (Ediciones de Bolsillo núm. 245).

30. Cuadernos de Estudio y Cultura. Núm. 15, junio 2002. «Homenaje a Francisco Candel», páginas 18 y 19. (Josep María Huertas Clavería).

31. La Vanguardia Española. Edición, sábado 4 de marzo de 1944. Núm. 24.182, página 3.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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6 comments

  • josep maria muria sibera agosto 17, 2020   Reply →

    amic antonio el teu correu me fet pasa un bon rato aquesta tarde per cert la foto teva amb la señora Juanita Girona Martinez que es de familia teva simple curiositat (gracies pel correu)

    • Antonio Santafé agosto 18, 2020   Reply →

      Gracias Josep Maria, son tantas las cosas que quiero escribir, que tus palabras me ayudan a seguir haciendo lo que más me gusta;contar la historia.
      Un fuerte abrazo, amigo.

  • joan2garcias agosto 17, 2020   Reply →

    Com sempre, intersante i molt ben documentat.

    • Antonio Santafé agosto 18, 2020   Reply →

      Gracias, tus palabras me dan fuerza para seguir investigando.
      Un fuerte abrazo.

  • Juan Carlos Cazorla septiembre 11, 2020   Reply →

    Buen trabajo de campo, información muy interesante y contrastada………….me haces rememorar conversaciones con mi padre, que si que me había explicado las inundaciones…….pero en esta narración me has hecho recordar, un apunte que me repetía una y otra vez cuando íbamos al puerto o al rompeolas y que ya tenia olvidado: me decía que cuando estaban construyendo el rompeolas, hubo una tempestad y que lo había destruido, por eso decía que no se fiaba de que realmente aguantase una nueva tempestad, yo entonces, con más juventud y menos paciencia, callaba pero pensaba que era una leyenda urbana o ganas de asustarme, partir un rompeolas me parecía algo imposible………………….ahora ya tengo algo para contar a mis hijos. También me da alegría que salgan lugares,iglesias, barrios………..donde nacieron y vivieron mis padres, La iglesia de Nuestra Señora del Port donde se casaron, Las Casas Baratas donde mi padre trabajaba en Beltran y Serra, Can Tunis……….y tantas cosas. Gracias Antonio por hilar tantos trocitos de historia y hacer un traje de historia elegante………………

    • Antonio Santafé septiembre 12, 2020   Reply →

      Gracias Juan Carlos por tu comentario. Sabes de sobras que es mi ilusión llegar al corazón de las personas, para que conozcan sus orígenes y la historia de sus antepasados.
      Siempre te agradeceré los comentarios que me ofreces, porque son sinceros, y para mi significan una inyección de moral para seguir trabajando para recuperar la memoria histórica de las tierras donde nacimos y crecimos.
      Recibe un fuerte abrazo amigo.

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